Con la aparición y desarrollo de las nuevas tecnologías, la forma de gestión de la atención al cliente ha ido evolucionando día a día. Se han incluido nuevas vías de comunicación entre los clientes y las distintas empresas. Uno de estos avances es, precisamente, la posibilidad de contar con una secretaria virtual.
Internet se ha convertido en una de las herramientas clave para la atención al cliente, y entre las nuevas formas de contacto entre el cliente y la empresa, el chat es una de las más populares. Son muchas las compañías que usan ya este servicio de mensajería instantánea para comunicarse con sus clientes. La asistente online se comunica de manera directa con el usuario.
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El chat es una de las formas de comunicación que cobró una gran importancia durante la década de los 90 y los 2000. El chat empezó siendo como una forma de comunicación a nivel de entretenimiento, pero ha ido evolucionando hasta convertirse también en una herramienta útil para la atención al cliente en las empresas.
La técnica de atención al cliente mediante chat es siempre la misma. Dentro de un horario establecido, las empresas ponen a disposición de los clientes un chat a través de su página web mediante el cual pueden comunicar sus dudas o incidencias. El asistente virtual será el encargado de escuchar, o leer en este caso, las consultas de los clientes a tiempo real,, a la vez que se lo escriben en el chat. Es un paso más allá del correo electrónico, ya que el cliente no tiene que esperar largos periodos a que la empresa conteste a su e-mail.
Mediante el chat, se da la oportunidad al cliente de explicarse en un tono al que está más adecuado. Además, la interactividad entre asistente online de las empresas y consumidor favorece la mejor atención al cliente puesto que podemos conocerle mejor. Muchas veces, los clientes son reacios a llamar por teléfono a la empresa si el número es de pago. Por eso, esta alternativa además de ser facilitar las cosas al cliente genera una mejor impresión en este. Usar un asistente virtual para responder a las necesidades de los consumidores en el servicio de atención al cliente puede suponer un salto de calidad para la empresa y en la percepción que tienen los clientes sobre ella.
Sin embargo, si se quiere contar con este servicio de asistente online hay que prestarle la suficiente atención y no menospreciarlo, que es uno de los fallos que se suelen cometer. Hay que prestar la misma calidad de atención al cliente por Internet que por teléfono, o de forma presencial.