Cuando un cliente llama a una empresa para resolver una duda o solucionar un problema, el principal objetivo es que quede resuelto. Esto es algo que más o menos todas las empresas tienen claro. Pero son más los aspectos que se deben considerar en la recepción de llamadas en la empresa. Vamos a ver cuáles son los que más valoran los clientes.
La atención al cliente es uno de los departamentos más cuidados y considerados en los últimos años. Han pasado de ser uno de los grandes olvidados a ser un área fundamental en las empresas. Esto se debe a que está demostrado que los clientes valoran mucho el trato recibido. Y si el cliente está contento, hay negocio, y sino, se pierde. Es por ello que la recepción de llamadas en la empresa debe cuidarse especialmente.
Escucha. Para empezar, el cliente quiere sentirse escuchado, por lo que el interlocutor deberá ser comprensivo y escuchar lo que le dice, asintiendo de vez en cuando, para mostrar interés en la consulta.
Resolución. Como hemos adelantado, e objetivo es resolver el problema o la duda que tenga el cliente, por lo que la persona encargada de la recepción de llamadas en la empresa debe ser resolutiva.
Valor añadido. Se valorará mucho más si la persona que le atiente le ofrece algo más. Por ello, debe ser una persona con don de gentes, cercana y amable.
Confiabilidad. Al final, el cliente que llama solo escucha una voz. Por ello, es muy importante que transmita paz y serenidad. El objetivo es ser alguien confiable, que el cliente esté seguro hablando con esa persona.
Empatía. Cuando recibes llamadas, la empatía es prácticamente el valor principal de la persona que las atiende.
Claridad. Incluso si no se puede resolver el problema, el cliente busca que la respuesta sea clara. La persona que atiende la llamada ha de mostrarse franco y claro a la hora de exponer lo que ocurra, sea lo que sea. Por ello, es importante que tenga fluidez, buena dicción y locución.